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La revista Kilómetro Scania le dedicó una extensa nota a esta importante empresa de transporte
de nuestra región, que cuenta con una larga trayectoria. Nos alegramos al ver cómo la familia Piloni da cuenta en la nota de la calidad de los servicios que recibe de Gonar Automotores, en ambas sucursales.
A continuación transcribimos la nota completa:
"Pioneros del litoral Desde la ciudad correntina de Monte Caseros, la familia Piloni reparte a todo
el país los frutos de la provincia mesopotámica. Pero detrás, hay 70 años de historia y de
esfuerzo, de gente precursora, casi colonizadores de este rincón litoraleño. Fanáticos de Scania,
comparten con Kilómetro una historia de vida muy particular.
En la zona conocida como la triple frontera, ese territorio casi común que hermana
geográficamente a la Argentina, Brasil y Uruguay, encontramos a Monte Caseros, precisamente,
en la provincia de Corrientes y escenario de esta historia. Desde la costanera llamada José H.
Piloni, sobre el río Uruguay se divisan las casas de la localidad de Bella Unión, en el vecino país
charrúa. Y, a escasos kilómetros de allí, se encuentra el pequeño poblado de Barra do Quaraí, en
el extremo brasileño.
José Piloni, hijo de inmigrantes italianos, nació en una colonia del paraje Fortuna, en los
alrededores de Monte Caseros, que por ese entonces era apenas un pueblo. Allí se instaló en el
año 1929, poco después de casarse con su esposa, nacida en Bella Unión, e hija, también, de
italianos; cuando don Piloni tenía 32 años. A partir de ese momento, colaboró de forma activa y
decidida con la comunidad que lo adoptó. Por ejemplo, se recuerda entre sus aportes, la
forestación con frondosos eucaliptos de la calle que hoy lleva su nombre y que, gracias al intenso
verde que la envuelve en la actualidad, posee una belleza particular.
Al igual que muchos de los habitantes de la zona, Don José poseía una quinta reducida donde
cosechaba naranjas, además, el matrimonio levantó un local de “ramos generales”. La mayoría
de sus clientes provenía de los talleres del entonces Ferrocarril Urquiza. En esos años la
expansión ferroviaria estaba en pleno auge. Con un camión modelo ’27, la familia llevaba todos
los días, los pedidos que hacían los ferroviarios –por supuesto–, en aquellos años nadie utilizaba
la palabra “delivery”–. Ese fue el comienzo, el primer paso de Transporte Piloni S.R.L., una de las
empresas más pujantes del litoral. En la actualidad, el reducido almacén se transformó en
supermercado y la firma cuenta con diez camiones, siete de ellos Scania, que recorren un
promedio de 15 mil kilómetros mensuales, cargados con hilo, arroz, fruta y objetos de mudanzas,
entre otros rubros.
La familia creció
En 1938, José Piloni adquirió un vehículo 0 kilómetro. Su hijo Alvino, de 69 años, al que todos
llaman Pocho, recuerda que “ese fue el primer camión en Monte Caseros con gomas duales, que
era todo un orgullo en esa época”. Con el paso del tiempo, los hijos de José incursionaron en la
empresa y en 1956 se iniciaron en el transporte de larga distancia. Por esos años, la firma, que
circulaba bajo el nombre de Citrícola Piloni, llevaba madera y fruta.
En 1980 adquirieron su primer Scania de la mano de Rubén Gamboa, que fue el primer vendedor
de la marca que visitó la zona. Y 18 años después, conocieron las virtudes de la Serie 4, que
recién se estrenaba y, según Adolfo, otro de los hijos del fundador de la compañía, tiene “tanto
confort como un auto”.
“Estamos muy contentos de ser usuarios de Scania, encontramos un gran rendimiento en la
marca y tenemos camiones con más de un millón de kilómetros que se comportan de maravilla.
La rentabilidad de la máquina es de 10 puntos”, asegura Adolfo.
En el predio donde se encuentra la administración, también realizan un mantenimiento liviano de
las unidades, que incluye, por ejemplo, cambios de aceite, engrase y limpieza de filtros. Todo
bajo la supervisión del concesionario Gonar, en Santa Fe, o de la sucursal de Gonar en
Concordia. Adolfo asegura que la firma “respeta todas las indicaciones que hacen los buenos
mecánicos del concesionario . Y que siempre se hacen un lugar, para atender a la empresa”.
Con respecto a Scania Assistance Adolfo acota: “Encontramos muy positivo ese servicio. Tengo
entendido, que no todos lo utilizan, pero es una gran tranquilidad para el usuario. Hasta ahora lo
requerimos cuatro veces, en lugares muy distantes entre sí, como Mendoza, La Rioja, Tucumán
y siempre nos socorrieron en el momento”.
En este momento, Transportes Piloni está integrada por Adolfo, Albino y dos de sus hermanos:
Abel, de 72 años, y Américo, de 57. Además, los hijos de Adolfo, Martín y Juan Ignacio, integran
la sociedad que, en conjunto con la producción de cítricos, el supermercado y las dos mil
hectáreas que utilizan para ganadería, emplea a alrededor de 110 personas.
Seiscientos kilómetros en 24 horas
En sus comienzos, Transportes Piloni demoraba un día para llegar desde Monte Caseros a
Buenos Aires. Esto se debía, por un lado, a que el trayecto hasta Zárate era de ripio y, encima,
debían cruzar el Río Paraná en balsa. Por otra parte, los camiones que utilizaban eran muy
diferentes a los Scania que usan ahora.
“Una vez volvíamos de Buenos Aires con Pocho, en un camión que habíamos comprado en 1958.
Me acuerdo que hacía un calor espeluznante e íbamos bastante cargados. En una subida de la
zona de Gualeguaychú, llevábamos el coche en segunda marcha, a fondo, y en un momento, nos
pasó lo más campante un tractor, que en esa época no desarrollaban más de 25 kilómetros por
hora. El paisano nos miraba…”, relata, entre risas, Adolfo.
Productos de exportación
Además del transporte, la familia Piloni se dedica a la citricultura, tarea que inició Don José, el
fundador de la empresa. Albino contó que su padre “compraba las naranjas criollas de las
quintas, las cosechaba y cargaba un vagón del Ferrocarril Urquiza por día, que iba a Chacarita”.
En 1973, sus hijos levantaron el galpón de empaque que poseen en la actualidad. Poco a poco,
el lugar creció y en este momento poseen alrededor de 450 hectáreas pobladas, los 12 meses
del año, con unas 100 mil plantas de naranja, pomelo y mandarina.
Desde la planta de empaque salen entre 800 y 1.000 cajones de fruta diarios, hacia destinos tan
lejanos como Rusia, Rumania y China. En Argentina, distribuyen sus productos en Rosario,
Buenos Aires, Corrientes, Posadas, Olavarría y también, los venden al público."
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